domingo, 24 de mayo de 2015

Detalle de las anotaciones:





El tercer especimen catalogado en los archivos del pez melón fue esta especie de mariposa. No fue él quien la encontró, fue al revés. Guiada por los sutiles sonidos en la respiración branquial del pez melón, que fuera del agua son ligeramente más altos, pudo seguir el rastro y encontrarlo.
Lo observó largamente mientras el pez melón pudo hacer sus esbozos y anotaciones.


sábado, 16 de mayo de 2015




Aquí va el siguiente especímen catalogado en los archivos del pez melón:
Se trata de una especie de lagarto que habita en los lugares más recónditos de cualquier bosque. Este híbrido se caracteriza por estar sujeto a las ramas de los árboles mientras su otra mitad trata de avanzar hacia delante a través de la espesura del bosque.
El lagarto y el pez melón se miraron durante largo rato sin decir palabra. Cuando se sintieron suficientemente cómodos, iniciaron un breve diálogo que el pez melón registró en sus cuadernos:

Pez Melón: ¿Cuanto tiempo llevas colgado de este árbol?
Lagarto: No lo puedo recordar. Mucho.
P.M: Qué te impide continuar tu viaje?
L: Estoy agarrado fuertemente a la rama
P.M: Suéltate, pues
L: No puedo. No veo a través de la espesura. No sé a dónde voy. Me soltaré cuando avance y vea lo que hay más allá.
P.M: Y cuando será eso?
L: Cuando me suelte.

Tras estas palabras, el lagarto se sumió otra vez en el silencio. 
No poder avanzar mientras se está sujeto, no poder soltarse hasta avanzar y ver qué hay más allá. He aquí la paradoja del lagarto.




domingo, 10 de mayo de 2015

Aquí tenéis al primer especimen, lo encontró buceando por las profundas aguas por las que suele dejarse llevar.
Lo podréis encontrar con dificultades si lograis una inmersión suficientemente profunda en aguas en las que haya la oscuridad necesaria, es un pez de naturaleza tímida también.
Tras un breve diálogo, el pez melón extrajo la siguiente información sobre la nueva especie:
Se trata de un pez dual, ambiguo, sufre de un constante desencuentro entre sus dos partes, a la vez que se necesitan la una de la otra para sobrevivir. Sus miradas no convergen, miran puntos diferentes de la realidad. Sin embargo, muy a su pesar, sus dos mitades estan unidas por un punto de encuentro, de contacto íntimo en que cualquier cosa puede pasar.
He aquí el misterio de este pez.






Como ya sabeis, el pez melón es un híbrido. Hace años, soñó con la idea de encontrar a otros como él. Empezó a observar a su alrededor y vio que no era el único, que había muchos híbridos a su alrededor. Y así empezó su proyecto de catalogarlos en un gran diccionario. Un diccionario de seres extraños, incatalogables, indefinibles que, al igual que él, permanecen en el anonimato, en las sombras y sólo aquellas personas que sean especialmente observadoras son capaces de ver.
Aquí os muestro algunos de los especímenes que logró identificar.


La Ponderosa

Ayer, en medio de todo el caos, me quedé atrapada con el coche entre dos rotondas cerradas, la de Corçà y la de la entrada a la Bisbal. Y ju...